Nino llegó en 2018 con apenas 2 meses de edad junto a su hermano, quien fue adoptado rápidamente. Nino pasó un tiempo en una casa de acogida, pero el dueño tuvo dificultades para controlarlo y regresó a la protectora, donde erróneamente lo etiquetaron como agresivo. En realidad, Nino era solo un cachorro juguetón y no estaba adecuadamente educado. Es un perro excepcionalmente bueno y ahora tiene 6 años. Nino es compatible con hembras y algunos machos. Es muy cariñoso y disfruta de la compañía de niños, mostrándose afectuoso y mimoso. Está en busca de un hogar donde pueda recibir el amor y la atención que tanto merece.