Bea es una mastina de aproximadamente 4 a 5 años que fue abandonada a su suerte y encontrada sola por unos campos. Es una perra sociable, agradecida, amorosa, paciente y serena, entre otros adjetivos que la describen. Bea es de color blanco roto y tiene una belleza impresionante. Está buscando un hogar donde pueda recibir el cariño y la atención que merece.